La tarde del Jueves Santo supone el término de la Cuaresma que dura hasta la hora nona (sobre las cuatro de la tarde). Con la Cena del Señor se evoca aquella última cena que Jesús celebró con los apóstoles.
Para Cristo y los apóstoles, última cena de la Pascua judía; para ellos y para nosotros, la primera cena de la Pascua del Señor. El Jueves Santo es el día del amor fraterno; se instituye la eucaristía y el sacerdocio. El lavatorio de los pies es una preparación y un complemento de la eucaristía.
La procesión hasta el Monumento y la adoración durante toda la noche representan el eco que deja la eucaristía.
Numerosos fieles se acercaron a nuestra parroquia para hacer la visita al monumento según costumbre implantada por San Felipe Neri en Roma y que se propagó por todo el orbe.