En el cuarto Domingo de Pascua se proclama en el evangelio que Jesucristo es el "Buen Pastor" que da su vida por sus ovejas, aquel que se implica hasta el extremo para darlo todo por los hombres.

Así recordaba el Papa Francisco, en la fiesta del Buen Pastor del presente año 2018, cómo solamente Jesús, el Buen Pastor, sana todas nuestras heridas.

En este marco litúrgico, la parroquia junto con las residencias “Santísima Trinidad” y “San Juan de la Cruz” y los fieles que compartieron la eucaristía dominical, celebraron la Unción de enfermos comunitaria.

El párroco recordaba que el sacramento de la unción de enfermos es un sacramento de “vivos”, no de “muertos”. Así renovó su significado el Concilio Vaticano II, aunque sean muchos todavía los que lo nombran como “Extrema Unción”. Con la administración del sacramento (realizado por el equipo sacerdotal de la parroquia), el enfermo o mayor recibe la gracia del Espíritu Santo para ser confortado y robustecido en la salud del alma.