En la tarde-noche del Miércoles de Ceniza (2 de marzo) La Trinidad ha vivido un acontecimiento histórico. Coincidiendo con el segundo día del Solemne Quinario a Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Santa Faz, ha tenido lugar la apertura de un Tiempo Jubilar concedido a la Hermandad del Vía Crucis del Santo Cristo de la Salud.
Presidió el acto de apertura Monseñor Demetrio Fernández González, obispo de nuestra ciudad. Con la iglesia vacía, todos los asistentes se congregaban en la plaza de la Trinidad. Hasta allí llegaba la procesión litúrgica encabezada por el pastor de la diócesis y en la que estuvieron presentes el párroco, D. José Juan Jiménez Güeto, así como los sacerdotes D. Francisco Molina de Gabriel y D. Pedro González Aguilera. Junto a los hermanos del Santo Cristo de la Salud, la junta de gobierno y numerosos cofrades de la Hermandad de la Santa Faz, así como un buen ramillete de la Hermandad del Perdón y fraternos pertenecientes a la Fraternidad del Santísimo Cristo de la Providencia, miembros de la comunidad parroquial y autoridades civiles entre las que se contaba el alcalde, D. José María Bellido.
El Hermano Mayor de la cofradía del Vía Crucis dio lectura al Decreto de la Penitenciaría Apostólica en la que se especifica el Tiempo Jubilar concedido a la Hermandad con motivo del L aniversario de su fundación y que irá desde el día 2 de marzo (Miércoles de Ceniza) hasta el día 5 de junio (Pentecostés), noventa días que comprenden los Tiempos de Cuaresma y Pascua. Este periodo es un tiempo de gracia en el que poder alcanzar la indulgencia plenaria. Para ello será necesario tener la disposición interior de un desapego total del pecado; confesarse; comulgar; y rezar por las intenciones del Santo Padre.
Durante el transcurso de la celebración tuvo lugar la imposición de la ceniza, inaugurando así el Tiempo de Cuaresma.